Gessamí Forner
09/may./2022
El periodista vasco Pablo González fue detenido el 28 de febrero en Polonia, país donde se encontraba informando sobre la guerra en Ucrania. Polonia le acusa de ser un espía ruso porque habla el idioma, tiene pasaporte ruso y cubre la zona, con especial hincapié en los conflictos independentistas. Su mujer, Oihana Goiriena, no ha podido hablar por teléfono con él, tampoco su abogado ni sus tres hijos.