PARTE II

El gran negocio de la electricidad en España

A día de hoy, los precios de la electricidad en el Estado español son uno de los más elevados de la UE. Por otro lado, la propiedad pública apenas genera un 5% de la energía eléctrica producida en el Estado. En un país donde manda un oligopolio que tiene la sartén por el mango, el precio de la electricidad sube y baja según los intereses de las grandes compañías. La entrada en vigor de la nueva tarifa de la luz ha coincidido con un aumento inicial considerable del precio de la electricidad. Mientras, el gobierno ha pedido a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia que investigue si hay “malas prácticas” que afecten a los precios de la luz.

oligopolio
El gran negocio de la electricidad en España

La nueva factura entra en escena

Según la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), el objetivo de la nueva factura es “incentivar un consumo eficiente de la electricidad y que el consumidor tenga un papel relevante en la descarbonización”, consiguiendo así que el importe de la factura dependa más de cuándo consumimos que de cuánto se consume y que se ahorre trasladando el consumo hacia las horas valle, frente a las horas punta.  

El regulador prevé que el cambio de modelo facilite el abaratamiento en el recibo de la luz por medio de esos “comportamientos eficientes, lo que reducirá la necesidad de llevar nuevas inversiones en redes”. De acuerdo al principio de que “importa más cuándo que cuánto", los precios de los peajes y los cargos serán diferentes entre los periodos horarios (valle, llano, punta) tanto en potencia como en el consumo. Los fines de semana y los días festivos se consideran valle. Los peajes y los cargos son los que están regulados. Los peajes son “los costes de las redes de transporte y de la distribución”. Mientras, los cargos son “los que fija el Gobierno asociados al fomento de las tecnologías renovables, los costes extrapeninsulares y las anualidades para pagar el déficit de tarifa”. 

La nueva tarifa establece tres franjas: horas punta (precio más caro), horas llanas (coste intermedio) y horas valle (precio más barato). La configuración es la siguiente: 

factura electricidad

Fuente: Elaboración propia

 

Es decir, los precios más bajos se darán de lunes a viernes de 0:00 a 8:00 de la mañana y durante 24h los fines de semanas y los festivos. El coste medio será a primera hora de la mañana (8:00-10:00), durante la tarde (14:00-18:00) y durante la noche (22:00-0.00) entre el lunes y el viernes. Mientras, de lunes a viernes, las franjas más caras serán entre las 10:00 y las 14:00, en plena mañana, y las tardes de 18:00 y 22:00.

La nueva factura de la electricidad afecta a todos los consumidores, pero su impacto dependerá si estamos en el mercado regulado o libre. En el Estado unos 10 millones de suministros están en el mercado regulado del Precio Voluntario al Pequeño Consumidor (PVPC), mientras que unos 16 millones de suministros están en el mercado libre, más caro y asociada a las comercializadoras como Iberdola, Naturgy o Endesa – Xataka

Para los clientes con tarifa regulada (PVPC), el cambio a la nueva tarifa será automático. El PVPC dispone de la tarifa de precio regulado que fija el Gobierno. Unos 10 millones de clientes tienen esta tarifa y de ellos 9.5 millones no tienen discriminación horaria. Los consumidores que se encuentren en el mercado libre (unos 16 millones) deberán estudiar las ofertas con la compañía eléctrica que tienen contratada. 

Con la nueva factura, todos los consumidores mantendrán por defecto su potencia contratada. Sin embargo, también se introducen algunos cambios al respecto. Con el nuevo sistema, el peaje de potencia pasa de los 38.04 euros por kW contratado a los 32.31 euros por kW. En este punto se puede apreciar una rebaja. 

Por otro lado, con el nuevo sistema, tenemos la oportunidad de contratar dos potencias diferenciadas, una punta durante casi todo el día (de 8:00 a 0:00), y otra valle que es mucho más barata para la madrugada (0:00-8:00), fines de semana y festivos. En el segundo tramo el coste doméstico será de 1.42 euros por kW contratado. Si la potencia contratada supera los 15 kW, se aplicaría el peaje 3.0 TD para industria.

Aunque no es siempre posible, lo más adecuado es adaptar los hábitos a los horarios más baratos para ahorrar. Otra recomendación de la CNMC para que la factura sea menos abultada es la de adaptar la potencia. Para facilitar este cambio, se permiten dos cambios de potencia gratuitos hasta el 31 de mayo de 2022, salvo en el caso de que se requiera asistencia técnica.

La CNMC afirma que más de un 50% de las horas del año son valle y que el consumo puede llegar a ser un 95% más barato que en las horas puntas. La CNMC entiende que el ahorro puede ser incluso mayor ajustando la potencia de punta y valle a la nueva estructura de peajes y cargos y con medidas adicionales como evitar simultanear consumos (no encender varios aparatos a la vez: por ejemplo, lavadora y cocina o plancha). Según el regulador, podrían suponer un ahorro de entre 200 y 300 euros anuales para un consumidor con alto equipamiento eléctrico, lo que le permitirá ajustar la potencia o cargar el vehículo eléctrico por la noche. También estima que trasladar 500 vatios de potencia del periodo de punta al valle y el 10% del consumo puede llevarle a un ahorro en el componente regulado de la factura superior al 15%, es decir del 7% en el recibo. Otro ejemplo de ahorro es el planchado, cuyo traslado fuera del periodo punta a llano puede disminuir en 38 euros al año su coste.  […]  La CNMC va a desplegar acciones pedagógicas para maximizar el nuevo modelo -  El País

Marisa Castro, miembro del Grupo de Energía de Ekologistak Martxan y Coordinadora del Área de Energía de la Confederación de Ecologistas en Acción, subraya en declaraciones efectuadas a Eulixe que “no nos han informado adecuadamente sobre el porqué del cambio de tarifa, sobre cómo nos afectarán estos cambios, en que nos afectarán y cómo podemos utilizar el cambio para nuestro propio beneficio y el del medio ambiente”. Añade que “parece que si cambiamos nuestras costumbres podemos abaratar la factura” pero que “de rebote, las grandes comercializadoras están haciendo ofertas en las cuales no se explica tampoco adecuadamente el impacto final en nuestros bolsillos”.

¿Por qué ha subido el precio de la luz?

El coste de la generación de la electricidad ha alcanzado unos niveles alarmantemente altos para un mes de junio: el 4 de junio, por ejemplo, el precio medio diario se ubicó en 80 euros el MW/h, cuando en 2019 por estas fechas se ubicaba en 49 y en 2018 en 58.  Debido a que este incremento ha coincidido con el cambio del régimen tarifario que ha aplicado el Gobierno desde el pasado 1 de junio, los ciudadanos han vinculado los precios crecientes con la nueva tarifa de la luz.

Sin embargo, debido a que son de naturaleza distinta, no sería adecuado mezclar ambos temas. Primero, el cambio en las condiciones de facturación va a suponer un encarecimiento de la electricidad para casi 10 millones de usuarios: de acuerdo con la CNMC, todos aquellos que estuvieran acogidos a la antigua tarifa 2.0 DHA (potencia contratada de hasta 10 kW y discriminación horaria en dos tramos) sufrirán una subida de precios de alrededor del 10% en su facturación.

Sin embargo, al mismo tiempo, según la CNMC, alrededor de 18 millones de usuarios experimentarán una rebaja con respecto al régimen tarifario anterior. En concreto, así sucederá con quienes tenían contratada la tarifa 2.0 A (potencia de hasta 10 kW sin discriminación horaria), la 2.1 A (potencia de hasta 15 kW sin discriminación horaria) o la 2.1 DHA (potencia de hasta 15 kW con discriminación horaria en dos tramos). Según subrayan algunos, los cálculos de la CNMC probablemente son demasiado optimistas ya que la Comisión presupone que los usuarios alterarán de un modo significativo sus hábitos de consumo y que, por esta vía, lograrán un ahorro.

Según estimaciones de la asociación Facua […], sobre la evolución de la tarifa semirregulada (PVPC), si se extrapolan a un mes completo los precios aplicados del 1 al 7 de junio, el recibo del usuario medio alcanzaría los 86 euros (impuestos incluidos), frente a los 60.58 euros en que se situó hace un año. El recibo de este mes, con esos 86 euros, sería el tercero más caro de toda la historia. Así, solo tendría por delante los 88.66 euros del primer trimestre de 2012 y los 87.81 euros de enero de 2017 – El País

Según subrayan algunas fuentes, el verdadero fondo del problema no es (salvo para los 9.6 millones de usuarios de la antigua tarifa 2.0 DHA) el cambio en los términos de facturación. Hay dos motivos que explican el aumento del precio de la electricidad:

  • Los precios del gas se hallan en máximos desde hace 10 años. Este recurso fósil es la materia prima que alimenta la tecnología habitualmente marginal (ciclo combinado etc.) en el mercado eléctrico (la tecnología marginal es la que fija en cada momento el coste de la generación eléctrica). Entonces, un precio más caro del gas significa una electricidad más cara en nuestro sistema.
  • El precio de los derechos de emisión de CO2 (las autorizaciones administrativas que necesitan adquirir las eléctricas que usen los combustibles fósiles para generar electricidad) se ha elevado sustancialmente en los últimos meses debido a la progresiva reducción de su oferta orquestada por la Unión Europea para avanzar en la descarbonización de la economía. Es decir, las autorizaciones administrativas necesarias para que nuestras centrales puedan generar electricidad también se han encarecido por orden de Bruselas. Aquí hay que tener en cuenta también que cuanto más caros son los derechos de emisión de CO2, más relativamente competitivas se vuelven las tecnologías renovables.

El sistema eléctrico español es un sistema privatizado. No se valora que tipo de energía es mejor consumir en un momento determinado para, por ejemplo, reducir las emisiones de gases de efecto invernadero o pagar menos impuestos de carbono. Vivimos en un sistema donde el precio de la luz lo deciden las grandes eléctricas según su criterio. Tenemos diferentes productores que ponen diferentes precios. Nunca se ha efectuado una auditoria de costes, es decir, no sabemos cuánto cuesta producir según la fuente. Esto es lo que pasa por no tener un sistema público en el cual podemos valorar los costes reales de la generación. Ahora solamente sabemos los precios en el que se vende la electricidad. El precio del gas es el que marca el precio final de la electricidad en España, si sube el precio del gas, aumenta la factura eléctrica - Marisa Castro, miembro del grupo de Energía de Ekologistak Martxan y Coordinadora del Área de Energía de la Confederación de Ecologistas en Acción, en declaraciones efectuadas a Eulixe

El 7 de junio, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico solicitó a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) que investigue si ha habido “comportamientos irregulares en el mercado eléctrico” tras la entrada en vigor de la nueva tarifa. En la carta enviada al organismo regulador, el Ministerio dirigido por Teresa Ribera pide que “analice cualquier posible comportamiento irregular o mala práctica de mercado por parte de los operadores coincidente con la entrada en vigor de la nueva estructura tarifaria”.

No es la primera ocasión en el que el Gobierno pide a la CNMC que investigue “posibles manipulaciones” en el mercado eléctrico. En enero, el Ministro de Consumo (Alberto Garzón) pidió a la CNMC que investigara si había habido irregularidades en este mercado, después de que el precio mayorista de la electricidad registrara máximos históricos para una referencia media diaria, con 94.99 euros por MW/h, en plena ola de frio provocada por la borrasca Filomena. De hecho, la CNMC siempre investiga de oficio los movimientos del mercado.