El cambio climático y el capitalismo están obligando a los agricultores chilenos a abandonar sus tierras

La sequía producida por el cambio climático está haciendo estragos en muchas regiones hasta hace poco fértiles de Chile. A esto hay que unir un "Código de Aguas" nacido durante la dictadura del general Pinochet, y según el cual los derechos de agua van al mejor postor. A lo largo de los años, los derechos de ríos, glaciares y aguas subterráneas se han vendido a empresas internacionales, principalmente en la minería y la agricultura a gran escala. Estos dos factores unidos están haciendo que los pequeños agricultores se queden sin agua para subsistir. 
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En muchos pueblos cercanos al desierto de Atacama, los agricultores tienen acceso restringido al agua proveniente de los ríos debido a su privatización. Foto: Juan Teixeira.
El cambio climático y el capitalismo están obligando a los agricultores chilenos a abandonar sus tierras

Esta historia es parte de Covering Climate Now, una colaboración periodística global de la que EULIXE forma parte, y que tiene como finalidad fortalecer la cobertura sobre el cambio climático

 

En 2018, Marta Morales, una pequeña agricultora de 35 años, se vio obligada a abandonar su ciudad natal de Colliguay en la zona rural del centro de Chile. Morales creció cultivando la parcela de un acre de su familia, produciendo verduras para comer y vender para obtener ingresos. Pero durante la última década, el ritmo confiable de veranos secos e inviernos lluviosos dio paso a una sequía prolongada, lo que dificultó el mantenimiento de la finca. “En el pasado llovía más”, dijo Morales. “Los agricultores se turnaban para regar sus fincas con agua de los arroyos de las montañas. Hoy, casi no quedan arroyos".

Al carecer de agua suficiente para nutrir sus cultivos, los agricultores comenzaron a salir de Colliguay. En los años previos a la mudanza de Morales, cerraron tres escuelas en Colliguay, incluida la más cercana a su casa, porque quedaban muy pocos niños. Preocupada por la educación de su hijo pequeño, se unió a la multitud de productores que emigraban a las ciudades.

Desde 2010, Chile ha estado sufriendo lo que los expertos llaman una megasequia o mega sequía. Actualmente, es la nación con mayor estrés hídrico en el hemisferio occidental, con hasta un 76 por ciento del país soportando condiciones de sequía. La sequía ha golpeado especialmente a agricultores como Morales. Luchando contra la escasez crítica de agua y un sistema que privilegia las operaciones agrícolas a gran escala sobre los productores artesanales, muchos pequeños agricultores ahora se están mudando a las ciudades. 

Crecimos como agricultores y reinventarnos en la ciudad no es fácil. Es difícil perder los lazos con la tierra, el sol y la naturaleza. Es triste y doloroso - Marta Morales, agricultora chilena.

La sequía es producto de múltiples factores. El mundo entró recientemente en La Niña , un período en el que las aguas frías del océano suben a la superficie del Pacífico oriental, lo que puede hacer que las lluvias en Chile sean más esporádicas. La Niña se ajusta a un patrón de enfriamiento más grande en el Pacífico oriental que es parte de la fluctuación natural del clima de la Tierra. 

El cambio climático causado por el hombre también está contribuyendo a la sequía. Las temperaturas del aire más cálidas están reduciendo los glaciares que alimentan los arroyos y ríos y alterando los patrones de lluvia . Un estudio de 2015 encontró que el cambio climático es el culpable de alrededor de una cuarta parte del déficit de lluvia en el centro de Chile.

El Yeso, uno de los principales embalses que abastecen de agua a Santiago, el 19 de marzo de 2016 y el 14 de marzo de 2020. El embalse se alimenta de la nieve derretida de las montañas circundantes. En medio de la sequía en curso, las montañas están viendo menos nevadas, lo que lleva a niveles más bajos de agua en el embalse. Crédito: Nexus Media News / NASA

 

Los períodos de sequía persistentes han convertido los bosques y las tierras de cultivo en un desierto. El problema se ha vuelto tan grave que el gobierno ha declarado una emergencia agrícola en muchas áreas.

En el centro y sur de Chile, estamos viendo cambios importantes en el paisaje. Tenemos un paisaje más seco. Tenemos menos bosque y menos verde en el verano - Lisandro Roco, profesor de economía agrícola en la Universidad Austral de Chile y miembro del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático de la ONU.

En Monte Patria, una pequeña comunidad en el árido norte de Chile, el 15 por ciento de los agricultores de la ciudad han emigrado a otros lugares . Estos agricultores constituyen el primer caso documentado de desplazamiento interno en Chile debido al cambio climático, según Naciones Unidas. Otras ciudades se están vaciando a medida que avanza la sequía.

“La gente se va porque no puede seguir haciendo agricultura”, dijo Carolina Alvarado Aspillaga, campesina y activista de Colliguay. “Las personas mayores no pueden transmitir el conocimiento local a los niños porque los niños emigran a la ciudad y no regresan porque no hay agua”.

Arturo Herrera Román, un pequeño viticultor del Valle Marga Marga en el centro de Chile, elabora vino con uvas traídas por los españoles en el siglo XVI. Dijo que, en su mayor parte, solía depender de la lluvia para cultivar sus uvas. Solo tenía que regar sus campos una o dos veces al año.

Pero ahora, las lluvias son escasas y Román no ha podido regar sus campos en los últimos cinco años debido a la escasez de agua. Dijo que Marga Marga Valley alguna vez fue el hogar de muchos productores, pero ahora solo quedan unos pocos.

La falta de agua de lluvia se puede ver en el color de los árboles y la pérdida de especies como la canela y el peumos [un árbol de hoja perenne de Chile]. El hecho de que sigamos produciendo vino es un acto de resistencia al cambio climático, pero a medida que pasan los años se vuelve más difícil e insostenible. Es difícil decir si estaremos aquí dentro de 10 años - Arturo Herrera Román, viticultor.

La privatización del agua

Un factor que dificulta las cosas para muchos pequeños agricultores es que Chile es el único país del mundo con un sistema de agua totalmente privatizado.

La Constitución chilena garantiza el acceso al agua, pero en la práctica, las fuerzas del mercado deciden quién obtiene los derechos de agua. En este tira y afloja, los agricultores industriales que cultivan cultivos de exportación, como los aguacates, pueden pagar más por el agua, dejando fuera a los pequeños agricultores.

“El mercado interno es abastecido principalmente por pequeños agricultores, pero es más difícil para estos pequeños agricultores familiares adaptarse al cambio climático", asegura el profesor Roco. 

El Codigo de Aguas nació durante la dictadura del general PinochetSegún el código, los derechos de agua van al mejor postor. A lo largo de los años, los derechos de ríos, glaciares y aguas subterráneas se han vendido a empresas internacionales, principalmente en la minería y la agricultura a gran escala

Copiapó, una ciudad en el desierto de Atacama de Chile. Las empresas mineras y los agricultores de la región compiten por los escasos suministros de agua . Crédito: Fernando Alarcón

Los agricultores no pueden registrarse para obtener derechos de agua porque el registro es demasiado complicado y hay una falta de información. Además, hay personas que compran derechos de agua, pero no los usan. Están esperando vender los derechos a un precio más alto en el mercado - Lisandro Roco, profesor de economía agrícola en la Universidad Austral de Chile y miembro del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático de la ONU.

Andrea Soledad Cisternas Araya es una campesina de Freirina en el Valle del Huasco, una zona fértil que bordea el desierto de Atacama. Los agricultores de su comunidad tienen acceso restringido al agua proveniente de los ríos: Araya paga una tarifa mensual equivalente a 10 dólares estadounidenses por unos pocos litros de agua para regar parcialmente sus cultivos. Los agricultores también tienen prohibido cavar pozos si no poseen los derechos sobre el agua subterránea. Araya, quien aboga por los derechos de agua de los pequeños agricultores, dijo que el Valle de Huasco alguna vez fue verde, cubierto de árboles frutales y vacas deambulando. Hoy, casi todo se ha ido y los agricultores están en movimiento.

Claramente estamos sintiendo los efectos del cambio climático, porque vivimos en un desierto semiárido. Cuando era niño solía llover cada 5 años. Hoy llueve cada 15 años. Los ríos están desapareciendo - Andrea Soledad Cisternas Araya, campesina.

Los activistas locales han estado impulsando reformas, con cierto éxito. El año pasado, los chilenos votaron para reescribir su constitución y pronto elegirán miembros para una convención constitucional. Los activistas esperan poner fin a la privatización del agua a través de este proceso. Y el mes pasado, el Congreso chileno aprobó un proyecto de ley para crear un ministerio para supervisar las 43 instituciones que manejan los derechos de agua. Por ahora, sin embargo, Chile aún carece de un marco a largo plazo para abordar la escasez de agua, dijo Roco.

“El acceso al agua es un tema urgente en Chile. La gente lo sabe. La gente está exigiendo un nuevo sistema de gobernanza para el agua ”, dijo Roco. “Mientras los agricultores enfrenten escasez de agua, la gente seguirá moviéndose”.

 


Artículo de Agostino Petroni y Sandali Handagama para Nexus Media News , un servicio de noticias sobre el cambio climático sin fines de lucro. Puedes seguirlos @petroniagostino y @iamsandali .