Pfizer y Moderna: un margen obscenamente escandaloso
Por Carlos Sánchez Mato*. LQSomos
Oirás decir que las farmacéuticas tendrán que ganar dinero y que no invertirán sin expectativas de grandes beneficios. No es cierto porque el origen de estas vacunas está en proyectos que llevan años desarrollándose en centros públicos de todo el mundo. La inversión pública en investigación y desarrollo de vacunas contra la Covid-19 suma 5.000 millones de euros. Si lees el gran informe que ha hecho la gente de @noessano_org verás que Moderna, Janssen, CureVac y Pfizer acapararon gran parte de los fondos: http://noessano.org/…/2021/05/Informe_Vacunas_NES_.pdf
Por eso las vacunas deberían ser bienes públicos globales y no se debería poder hacer negocio con ellas. Pero los Estados, una vez más, se han puesto del lado de las grandes compañías farmacéuticas. No han hecho valer ni el dinero público invertido ni los intereses de la gente.
¿Alguien en su sano juicio entendería que los bomberos fueran un cuerpo privado y que acudiesen a un incendio dependiendo de los ingresos y beneficios que obtuviesen?
Pues eso es lo que permitimos que ocurra con las vacunas y las farmacéuticas… Hacer negocio con la salud de las personas se cobra vidas y medios materiales de subsistencia en los países más empobrecidos. Pero además engordará los beneficios futuros de las farmacéuticas porque así no se acaba con el Covid19: https://news.un.org/es/story/2021/01/1486742
* Economista. Profesor de Economía Política Mundial en la UCM. Responsable Elaboración Programática de IU. @carlossmato