¿Qué le pasa a Jean-Claude Juncker?

¿Qué le pasa a Jean-Claude Juncker?

Que la Unión Europea no pasa por su mejor momento lo sabemos todos. El auge de la extrema derecha y nacionalismos varios, la crisis migratoria, el brexit, crisis económica y de modelo... son muchos los retos a los que está expuesto el máximo organismo europeo. Por eso lo último que necesita es que uno de sus hombres fuertes, el Presidente de la Comisión Europea, vaya por ahí creando polémica a cada paso. Y eso es exactamente lo que hace Jean-Claude Juncker, que nos tiene a todos atónitos con sus ya habituales salidas de tono. En el siguiente vídeo lo podéis ver hace menos de un mes, en la cumbre de la UE, actuando como un niño de 8 años: le revuelve el pelo a una colaboradora, hace gestos extraños, tira los papeles al suelo, tapa una cámara con la mano...

Podríamos pensar que ha tenido un mal día, que le ha sentado mal la comida o que ha esnifado pegamento sin querer de algún documento. Pero no, este es el Juncker habitual en los últimos tiempos. El siguiente vídeo es de julio de 2018, en una cumbre de la OTAN, y así de primeras viendo las imágenes lo que parece es que vaya completamente borracho:

Sin embargo los que trabajan con él lo defienden a capa y espada, e incluso desde círculos cercanos aseguran que "tiene problemas de salud heredados de cuando casi pierde la vida en 1999 en un accidente de tráfico". Sus colaboradores dicen que es así, un personaje curioso, campechano, extrovertido y bromista. Ante el manoseo de pelo de su subjefa de protocolo, el portavoz de la Comisión Europea, Margaritis Schinas, aseguró: "No respondemos a comentarios. Pasa a menudo, estamos encantados de trabajar con un presidente que nos trata como amigos y como colegas". Como cuando en una rueda de prensa con el presidente del Consejo Europeo y el presidente de Suráfrica, que desaparece del estrado en extrañas circunstancias. Después se supo que era porque llevaba un zapato de cada color. La típica broma de Jean-Claude.

Estas salidas de tono podrían quedarse en meras anécdotas, pero lo cierto es que es preocupante la repetición de este tipo de comportamientos en uno de los máximos dirigentes de la UE. Estos capítulos podrían llegar a tener graves consecuencias debido a la alta exigencia del cargo. Como por ejemplo pudo suceder durante un Consejo Europeo en el que fue recibiendo a los jefes de Gobierno dándoles palmaditas, bofetadas, jugando con sus corbatas, besando calvas... hasta que apareció el primer ministro húngaro, Vícktor Orban, y le gritó sin cortarse un duro: "¡El dictador!". A ver Jean-Claude, un poquito de porfavor que eres el presidente del Consejo Europeo...

Ya sea por problemas médicos, por edad o porque simplemente es así, lo cierto es que un cargo con tanta responsabilidad debería medirse un poco. Para terminar, os dejamos con uno de nuestros vídeos preferidos de Juncker, ya no solo por el contenido, sino por el maravilloso plano secuencia que se marcó el cámara del congreso europeo. El vídeo capta el momento de otra gambada de Jean-Claude, hace menos de un mes, y con la primera ministra británica, Theresa May: “¿Qué me has llamado? Me has llamado nebulosa. Lo has hecho. Nebulosa”, le reprochaba May. Unas acusaciones que Jucker negaba hasta en dos ocasiones: “No, no lo he hecho”. Ay Jean-Claude...