Sí, has leído bien: el poderoso Big Mac puede decirnos mucho sobre la economía de un país. Al menos, esa fue la idea que tuvo la revista The Economist cuando introdujo el Índice Big Mac en 1986 para transmitir el poder adquisitivo de los consumidores en cada país.
El índice Big Mac se preparó originalmente (sí, se pretendía hacer un juego de palabras) como una forma generalmente buena de comparar la paridad de poder adquisitivo (PPA) de diferentes países. Básicamente, la teoría detrás de la PPA es que, con el tiempo, el precio de una "canasta" de productos similares en cualquiera de los dos países tenderá a igualarse, en este caso esa "canasta" es una hamburguesa, y cuanto más igualado sea el precio de la canasta, mayor paridad haya entre los países.
Los últimos datos del índice Big Mac proporcionan una amplia prueba de ello. En el medio del espectro, tenemos el hogar de Big Mac, EEUU, donde una de estas hamburguesas icónicas cuesta 4,9 euros.
en Suiza, un Big Mac te costará 5,9€, lo que llega a ser el precio más alto del ránking. En el otro lado del espectro, un Big Mac en Rusia solo cuesta 1,50€.

Si bien el Big Mac no puede proporcionar una explicación mágica de cómo funciona la economía mundial, sí proporciona una buena base para comenzar a investigar qué está sucediendo en la economía de un país, ya que se ha convertido en un producto de compra regular en todo el mundo.

Fuente: World Atlas