FOTO DEL DÍA: En 1998 la balsa de residuos de Aznalcóllar, en Sevilla, se rompió provocando un gran desastre medioambiental

FOTO DEL DÍA: En 1998 la balsa de residuos de Aznalcóllar, en Sevilla, se rompió provocando un gran desastre medioambiental
El Parque Nacional y Natural de Doñana sufrió el 25 de abril de 1998 un grave desastre ecológico, cuando se rompió la Balsa Minera de Aznalcóllar, propiedad de la empresa sueca Boliden, que contenía los residuos de la mina. La construcción de tres diques logró impedir que el veneno alcanzara el corazón del parque, pero las aguas estancadas en la balsa contenían elementos agresivos como arsénico, plomo y mercurio, que tras la ruptura, contaminaron los campos colindantes. Aunque los propios suelos hicieron de depuradora y evitaron que los metales dañinos alcanzaran el subsuelo, los lodos que se acumularon en muchas zonas han hecho que algunos terrenos tengan en la actualidad gran concentración de metales pesados que todavía no se han conseguido eliminar. El vertido cubrió 62 kilómetros, supuso unos gastos de más de 250 millones y algunos informes del año 2015 todavía destacaban la existencia de terrenos en los que aún no crecía “ni la mala hierba”. En la actualidad existe un proyecto para la reapertura de la mina que generaría unos 2.000 empleos en la zona, pero que algunos grupos ecologistas consideran como una locura, por el alto riesgo de que el desastre de Aznalcóllar se pueda volver a repetir.