Foto del día: cómo sacaban muelas hace 130 años

Foto del día: cómo sacaban muelas hace 130 años
Unos 3000 años antes de Cristo ya existía la inquietud de acabar con los dolores y molestias dentales cuando se sacaban las muelas.  En Persia, la India y el antiguo Egipto utilizaban usaban anestésicos de origen vegetal como el cannabis. Años después del 500 AC, existe constancia de que Hipócrates y Galeno utilizaban una esponja empapada en una mezcla de opio, beleño y mandrágora, que servía como anestésico para las operaciones de salud dental. Además, los antiguos griegos inducían el sueño a través de infusiones hechas a base de fármacos y hierbas para intervenir en la boca. Visita al dentista. Estados Unidos, 1892 La historia de la anestesia local moderna empieza en 1844, cuando Horacio Wells, un dentista de Hartford (EEUU),  aplicó los efectos del óxido nitroso (gas de la risa o hilarante) como anestésico en sus intervenciones. Corría 1877 cuando S. White, dentista de Filadelfia, comenzó a suministrar el óxido nitroso a través de una botella de metal de grandes dimensiones.  Seguramente es el sistema que utilizaba el cirujano de la fotografía, ya que vemos grandes botellas metálicas en las estanterías del despacho. Clover Coleman inventaría la máscara nasal pocos años después, en 1899. Un sistema de inhalación que significó otro paso al frente para la mejora en la aplicación del óxido nitroso y de la anestesia dental. A principios de 1900 comenzó a usarse de forma activa la cocaína como elemento. El primer anestésico local de origen sintético era la novocaína, inventada por Alfred Einhorn en 1904. Un año después, el Doctor Heinrich Braun mejora esta fórmula añadiendo adrenalina a la cocaína para mejorar el resultado y la duración de la anestesia. En 1943 sintetizan la lidocaína. La lidocaína se comercializó en 1948 y actualmente es el anestésico local más utilizado en la odontología en todo el mundo.   Fuentes: Wikipedia, ClinicasCulmen