El lugar más peligroso para la mujer es...su hogar

El lugar más peligroso para la mujer es...su hogar
El hogar familiar es el lugar más peligroso para la mujer. Así lo dice el último informe de la Oficina de Naciones Unidad contra la Droga y el Delito (UNODC), publicado el pasado domingo (25 de noviembre) en el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Más de la mitad de las mujeres que fueron asesinadas en todo el mundo el año pasado fueron victimas de sus parejas o familiares, según el informe publicado por la ONU. Esto convierte al hogar en "el lugar más peligroso para una mujer". En las estadísticas publicadas se calculó que de un total de 87.000 casos de homicidios de mujeres en todo el mundo en 2017, unas 50.000, el 58%, fueron cometidas por parejas o miembros de la familia de las víctimas, "esto equivale a unas seis mujeres asesinadas cada hora por personas que conocen", dijo el organismo con sede en Viena.
En términos globales, el 80 por ciento de las víctimas de homicidios en todo el mundo eran hombres, pero "las mujeres siguen pagando el precio más alto como resultado de la desigualdad de género, la discriminación y los estereotipos negativos", dijo el jefe de la UNODC, Yury Fedotov. "El hecho de que las mujeres continúen siendo afectadas por este tipo de violencia en mayor medida que los hombres es indicativo de un desequilibrio en las relaciones de poder entre mujeres y hombres dentro de la esfera doméstica". El estudio desvela que África y las Américas eran las regiones donde las mujeres tenían mayor riesgo de ser asesinadas por sus parejas o miembros de su familia. En África, la tasa fue de alrededor de 3,1 víctimas por cada 100.000 mujeres, mientras que en las Américas fue de 1,6 víctimas, en Oceanía 1,3 y en Asia 0,9. La tasa más baja se encontró en Europa, con 0,7 víctimas por cada 100.000 mujeres. Según la UNODC, en los últimos años "no se han logrado avances tangibles" en la lucha contra este mal "a pesar de la legislación y los programas desarrollados para erradicar la violencia contra las mujeres". Las conclusiones del informe "resaltan la necesidad de una efectiva prevención del crimen y respuestas de la justicia penal a la violencia contra las mujeres", dijo la UNODC, enfatizando la necesidad de medidas para aumentar la seguridad y empoderar a las posibles víctimas al tiempo que se responsabiliza a los abusadores. El estudio también pide una mayor coordinación entre la policía y el sistema judicial, así como los servicios sociales y de salud. Y la UNODC también cree importante involucrar a los hombres en las soluciones, incluso a través de la educación temprana.