Este domingo se juega "El Clásico", el partido más mediático de la Liga. A nivel deportivo, viene marcado por una doble ausencia que no se producía en los últimos 11 años, la de Messi y Cristiano. En estos años, entre ambos marcaron 44 goles "clásicos", por lo que veremos quien pone la pólvora en este encuentro. También está en juego la continuidad del entrenador madridista, Julen Lopetegui, a quien un desmayo más podría poner fuera del Bernabéu. Pero este partido es mucho más que deporte. Nos atreveríamos a decir incluso que el fútbol es algo secundario en la rivalidad entre estos dos clubes. Ambos representan modelos e ideologías muy diferentes en diversos aspectos, y se hayan inmersos en una carrera empresarial por ver quien es el primero en llegar a los mil millones de euros en ingresos. Seguramente haga falta photo finish, porque analizando diversos factores podemos ver que la realidad económica es muy pareja. De momento, el Barça toma la delantera este año con una previsión de 840 millones en ingresos ordinarios, frente a los 752 millones que espera generar el Madrid. Los ingresos provienen de diversas fuentes, principalmente los derechos televisivos, la publicidad, venta de merchandising y entradas al estadio. Pero hay otros, como por ejemplo la construcción de nueve parques temáticos por todo el mundo que tiene previsto el FCB, o un megacomplejo de 12.000 metros cuadrados que los madridistas abrirán en China. Los jugadores también cuenta como activos, y en este caso el RM tiene un valor total de 969.00.000millones de euros, siendo el jugador más caro Gareth Bale con 90.000.000, mientras que el FCB tiene una plantilla cuyo valor asciende a los 1.140.000.000 millones de euros , siendo Messi el más caro, con 180 millones. Respecto a las amortizaciones de los fichajes, las cuentas de 2017-2018 constatan que el FC Barcelona es el más activo, destinando 118,68 millones de euros a la amortización de jugadores, mientras que el Real Madrid destinó 84,92 millones, un 8% menos. En relación a la deuda, el Real Madrid ha decidido irse hasta los 575 millones de euros para remodelar el estadio, tras concluir el último ejercicio con una deuda neta negativa de 106,97 millones. Por el contrario, el Barça vio incrementado este importe, desde ocho millones negativos a 157 millones de euros en junio de 2018. A nivel social y político. Mientras el FCB siempre ha mostrado una tendencia de apoyo hacia el independentismo catalán, el RM representa los valores de la unidad de España y el centralismo. Con la inestable situación política en el estado español, cada clásico se convierte también en un partido ideológico en cierta medida. En la última cita de la Liga, donde el Barça recibió al Sevilla, los aficionados del equipo azulgrana desplegaron una pancarta antes del comienzo del partido en la que se podía leer: "solo las dictaduras encarcelan a líderes políticos pacíficos". En el último partido de Champions en el Camp Nou también se pudieron ver las siguiente pancartas:   Así, que se espera que el clásico de este domingo esté muy caldeado, mas allá de la rivalidad deportiva.