El "menor de los males" se impone en las elecciones armenias

El vencedor de las elecciones fue el primer ministro en funciones Nikol Pashinyan, de Contrato Civil. Foto: Celestino Arce - Eulixe.
Armenia celebró este domingo elecciones parlamentarias, en las que dos millones y medio de personas elegían los 132 diputados que votarán para formar el gobierno del país. A pesar de que se presentaron un total de 26 listas electorales, la lucha real por el poder la protagonizaron dos coaliciones: Contrato Civil del primer ministro en funciones Nikol Pashinyan y la Alianza Armenia de Robert Kocharyan. El resultado final ha roto todos los pronósticos y encuestas previas: se esperaba la victoria de Pashinyan, pero no con tanta holgura. Lo más sorprendente es que el país, sumido en una profunda crisis tras la derrota militar ante Azerbaiyán en el Karabaj, no ha mostrado ganas de cambio, otorgando amplia mayoría al partido que ha gobernado los últimos años, lo que muchos consideran como "el menor de los males". 

Resultados:

  • Contrato Civil (Pashinyan) 53,92% - 687.414 votos. 72 escaños.
  • Bloque Armenia (Kocharyan) 21,04% - 268.165 votos. 27 escaños.
  • Bloque Tengo el Honor (Sargsyan) 5,23% - 66.647 votos. 6 escaños.

Todas las demás listas quedan fuera del parlamento. A pesar de esta mayoría, Pashynian no lo tendrá fácil para gobernar debido a la resistencia de los partidos opositores y sobre todo de una gran parte de la sociedad, que lo considera un mal gestor a nivel geopolítico.

Robert Kocharyan, de Alianza Armenia. Foto: Celestino Arce

Pashinyan, el menor de los males

Estas elecciones se anticiparon debido a la derrota armenia en la guerra del Karabaj entre septiembre y noviembre del año pasado. La crisis en la que se ha sumido el país llevaron a la dimisión del primer ministro Pashinyan y a esta convocatoria. A pesar de ello, se ha hecho con 72 de los 132 escaños. 

Pashinyan llegó al poder en 2018 tras una serie de protestas, conocidas como la “Revolución de Terciopelo”, comenzando una política internacional que buscaba mayor autonomía de Rusia, así como un programa de mejoras sociales a nivel interno, especialmente en zonas rurales, y lucha anticorrupción. Su gestión tuvo un fuerte apoyo social y resistencia de las élites del régimen
anterior, pero la derrota militar cambió la situación. Parte de la población le echó en cara su nefasta gestión en tiempos de guerra. Sin embargo, como señala el politólogo armenio Richard Giragosian, los que la gente ha elegido en realidad es “el menor de dos males”.

Sus oponentes eran representantes del antiguo y corrupto régimen como el ex presidente Kocharyan, además en otras dos candidaturas hay otros dos ex presidentes del país, Levon Ter-Petrosyan y Serj Sargsyan. Como su punto fuerte todos ellos aportaban la victoria militar sobre Azerbaiyán en los años noventa del siglo pasado. Mientras que Pashinyan perdió la guerra, pero le devolvió la ilusión a la gente con su gestión más abierta y mucho menos autoritaria.

Estos puntos fuertes y débiles de los dos bandos teóricos han copado una campaña electoral donde los insultos, las acusaciones contra los rivales y las promesas de cárcel para ellos han sido continuos, lo cual ha separado aun más a los armenios de su clase política.