"Como Hitler, ¡pasajeros al tren!": la extrema crueldad gratuita con animales de un laboratorio en Madrid

"¡Muérete hijo de puta!, estoy hasta la polla de conejos y conejas"; "Me cago en el puto perro"; "¡Hijo de puta el mono!"; "Déjale que se rompa la columna (un conejo), no pasa nada"; "¡Cerda psicópata!" o "Como Hitler, pasajeros al tren", son algunas de las barbaridades que se pueden escuchar en un vídeo publicado por la ONG Cruelty Free International, y que destapa la extrema crueldad que viven cientos de animales en el laboratorio Vivotecnia de Madrid. Las imágenes son demasiado duras de digerir para cualquier persona con un mínimo de empatía.

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Cachorro de perro de la raza Beagle en el laboratorio Vivotecnia de Madrid // Cruelty Free International - Carlota Sorosa.
"Como Hitler, ¡pasajeros al tren!": la extrema crueldad gratuita con animales de un laboratorio en Madrid

La ONG Cruelty Free International (CFI) ha destapado en una investigación exclusiva actos de terrible crueldad contra animales en un laboratorio de Madrid dedicada a la investigación por contrato (CRO) para farmacéuticas y biotecnológicas. La empre4sa se llama Vivotecnia, y realiza pruebas de toxicidad para diversas industrias. El vídeo en cuestión resulta muy difícil de ver para cualquier persona en su sano juicio: perros, monos, cerdos, conejos o ratas sufriendo todo tipo de torturas y vejaciones de modo totalmente gratuito, entre las risas y bromas del macabro personal. 

Es inimaginable que esto pueda estar pasando hoy en día en Europa ... Estas imágenes muestran la cara oscura de la regulación de la experimentación animal. Hemos destapado una mezcla horrenda de sufrimiento y crueldad en la forma en que estos animales están siendo mantenidos, manejados y maltratados en pruebas de toxicidad, además de numerosas violaciones de la ley española y europea - Dra. Katy Taylor, directora científica de CFI.

Los animales utilizados en la instalación incluyen monos, cerdos, perros, conejos, ratones y ratas, y la mala praxis incluye:

  • Actos deliberados de crueldad gratuita hacia los animales, incluidos golpes y sacudidas.
  • Burlarse y burlarse de los animales que estaban estresados ​​y sufriendo, incluidos aquellos que estaban siendo asesinados o que estaban muriendo.
  • Técnicas espantosas y malas prácticas que infligen aún más sufrimiento y muerte, incluida la falta de anestesia o la anestesia inadecuada.
  • Mal manejo y sujeción de los animales, lo que provoca que los conejos sufran lesiones en la columna.
  • Animales muertos en presencia de otros de su especie.
  • Infracciones sistémicas de la legislación española y de la UE. 

Las pruebas de toxicidad implican dosificar a los animales para ver qué cantidad de una sustancia química o fármaco se necesita para causar un daño grave, en un intento de medir qué dosis "segura" podría ser para los seres humanos. A grupos de animales se les inyecta o se les fuerza a ingerir o inhalar cantidades crecientes de una sustancia para medir los efectos tóxicos que pueden ser graves e incluyen vómitos, hemorragia interna, dificultad respiratoria, fiebre, pérdida de peso, letargo, problemas de la piel, insuficiencia orgánica e incluso muerte. No se proporcionan anestésicos ni analgésicos. 

Debido a que cada especie de animal a menudo reacciona de manera diferente a la misma sustancia y la reacción en los seres humanos puede ser totalmente diferente, creemos que las pruebas también son predictores poco confiables de medicamentos seguros y efectivos para humanos. 

Las imágenes del denunciante muestran animales objeto de burlas y abusos. Vemos a un miembro superior del personal dibujando una cara en los genitales de un mono mientras el animal es inmovilizado en la mesa y se le extrae sangre; vemos perros y ratas balanceados y animales cortados sin anestesia. El video muestra monos jóvenes físicamente restringidos, sin sedación para reducir su ansiedad; monos golpeados en la cabeza, tirados de su piel y jurados por luchar. Vemos conejos luchando con sus dispositivos de sujeción, cayéndose y sufriendo graves lesiones en la columna.

A pesar de la evidencia de las imágenes, esto es lo que afirma Vivotecnia en su sitio web:

El bienestar de los animales utilizados con fines de investigación es de suma importancia para Vivotecnia, así como el estricto cumplimiento y respeto de la legislación vigente en materia de protección de los animales utilizados en investigación y con otros fines científicos, incluida la educación. Nuestro objetivo es alcanzar los más altos estándares en bienestar animal, no solo desde el punto de vista de nuestra responsabilidad moral sobre ellos, sino también porque estamos convencidos de que no podríamos alcanzar la excelencia en investigación sin un adecuado bienestar animal. Nuestros experimentos con animales siguen el estándar legal y son evaluados por un Comité de Ética en Experimentación Animal que promueve el uso de métodos alternativos, la reducción del número de animales utilizados y el refinamiento en los protocolos experimentales aplicados.

Todos los procedimientos de trabajo de Vivotecnia cumplen con la Directiva de la UE (2010/63 / UE) y el Reglamento Español (RD 53/2013).

INCUMPLIMIENTOS DE LA LEY DE LA UE Y ESPAÑOLA

Vivotecnia infringe sistemáticamente la legislación europea que regula el uso de animales en procedimientos científicos y la legislación española. Estas infracciones incluyen:

  • El comportamiento cruel de algunos miembros del personal hacia los animales.
  • Los perros a menudo se separan de sus compañeros de jaula en viviendas estériles y mal mantenidas, sin juguetes ni ropa de cama, sin programas regulares de ejercicio.
  • Cerdos alojados en gradas en una habitación oscura sobre un piso duro de rejilla sin áreas de descanso, sin ropa de cama y sin enriquecimiento.
  • Técnicas de manipulación inadecuadas utilizadas para levantar y sujetar animales, por ejemplo, animales recogidos por el pescuezo, las orejas y la cola.
  • Los animales sufren habitualmente más de lo necesario como resultado de las prácticas deficientes utilizadas en procedimientos como la sonda oral y la extracción de sangre.

 

Fuente: crueltyfreeinternational.org