Poco a poco, China se está convirtiendo en la potencia tecnológica mundial. Ya os contamos su plan para abrir una central eléctrica en el espacio. Ahora han estrenado el primer transporte urbano autónomo y sin raíles, el tren ART (Autonomous Rail Rapid Transit).

Lo han inaugurado en la ciudad china de Yibin, donde se podrá disfrutar de un tren que no tiene conductor y que funciona de forma totalmente autónoma, gracias a unos raíles virtuales de 3,75 metros de ancho pintados en la carretera y que se detectan con una serie de cámaras y sensores especiales. El tren cuenta con una combinación de LIDAR y GPS que guía al vehículo a través de las calles de forma similar a como se comportan los coches autónomos.

La línea T1 del ART en Yibin tiene una longitud de 17,7 kilómetros y se espera que sea usada por más de 10.000 usuarios diarios, aunque el próximo paso, convertirla en una línea de alta velocidad, podría aumentar esa cifra a 25.000 pasajeros al día. Este singular tren funciona con grandes baterías que son capaces de mover todo ese volumen que permite viajar a algo más de 300 personas en cada tren y alcanzar velocidades de hasta 70 km/h.

Esta solución puede llegar a ser mucho más económica que el tranvía: frente a los 150 a 200 millones de yuanes que cuesta un kilómetro de tranvía, por ejemplo, esta propuesta podría reducir ese mismo coste a 50 o 100 millones de yuanes para la misma distancia.