La coalición liderada por EEUU mató a mas de 1.600 civiles en la batalla de Raqqa

La coalición liderada por EEUU mató a mas de 1.600 civiles en la batalla de Raqqa

La batalla de Al Raqa fue una de las más determinantes durante la guerra de Siria. Supuso el fin de la campaña «Ira del Éufrates», liderada por las Fuerzas Democráticas Sirias contra el DAESH, y apoyados con ataques aéreos y tropas de tierra de la coalición dirigida por Estados Unidos. La operación finalizó con la captura total de la ciudad por las fuerzas del ejército democrático sirio el 17 de octubre de 2017. La “campaña aérea más precisa de la historia” (tal y como la vendieron) convirtió Raqqa en la ciudad más destruida de los tiempos modernos, y supuso la muerte de miles de civiles. Dos años después, Amnistía Internacional y Airwars acaban de publicar la investigación más exhaustiva sobre las muertes de civiles, cifrando en 1.600 las vidas perdidas como consecuencia directa de miles de ataques aéreos efectuados en la campaña militar de la coalición contra Raqqa de junio a octubre de 2017. Las fuerzas estadounidenses, británicas y francesas siguen negando su responsabilidad y admiten sólo el 10% de los homicidios. La web donde se publica parte de la investigación está llena de testimonios, imágenes, vídeos y otros documentos que certifican la brutal masacre de civiles y comprometen la posición de la coalición.

Cuando comenzó la ofensiva, el Estado Islámico llevaba casi cuatro años gobernando Raqqa. Había cometido crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad y torturaba y mataba a quienquiera que se atreviera a oponerse a él.

Miles de civiles murieron o resultaron heridos en la ofensiva lanzada por la coalición dirigida por Estados Unidos para librar Raqqa del Estado Islámico, cuyos francotiradores y minas habían convertido la ciudad en una trampa mortal. Muchos de los bombardeos aéreos fueron poco precisos, y decenas de miles de ataques de artillería fueron indiscriminados, así que no es de extrañar que mataran e hirieran a muchos centenares de civiles


Donatella Rovera, asesora de Amnistía Internacional sobre respuesta a las crisis.

En cuatro visitas iniciadas cuando se estaba librando aún la batalla, los equipos de investigación de Amnistía Internacional pasaron en total alrededor de dos meses en Raqqa, llevando a cabo investigaciones sobre el terreno en más de 200 lugares atacados y entrevistando a más de 400 testigos y supervivientes. Amnistía Internacional determinó también cuándo fue atacado cada uno de los más más 11.000 edificios de Raqqa destruidos. Participaron más de 3.000 activistas de 124 países, que analizaron en total más de dos millones de fotogramas de imágenes de satélite. El Cuerpo de Verificación Digital de la organización, con sede en seis universidades de todo el mundo, analizó y autentificó las imágenes de vídeo tomadas durante la batalla.

  • Casos revividos

Rhetoric versus Reality revive casos de familias que vivieron y murieron en la guerra, llevando a los usuarios y usuarias a un viaje por la ciudad, presentándoles a las personas supervivientes para que escuchen sus testimonios y visitando sus hogares destruidos. Desde los puentes del Éufrates bombardeados hasta el casco antiguo prácticamente demolido de las inmediaciones del céntrico estadio, ningún barrio se libró de la destrucción. El sitio web interactivo combina fotografías, vídeos, experiencias de inmersión a 360º, imágenes de satélite, mapas y visualizaciones de datos para poner de relieve casos y recorridos de civiles atrapados por los bombardeos de la coalición. Los usuarios y usuarias pueden también consultar datos sobre civiles que murieron, en muchos casos después de haber huido de un lugar a otro de la ciudad.

  • Manzanas enteras arrasadas

La enorme cifra de víctimas civiles de Raqqa no resulta sorprendente si se tienen en cuenta los incesantes ataques efectuados por la coalición con munición que era poco precisa hasta el punto de ser de uso indiscriminado en caso de utilizarse cerca de civiles. Un mando militar estadounidense se jactó de haber disparado 30.000 proyectiles de artillería durante la campaña –el equivalente a un ataque cada seis minutos durante cuatro meses seguidos–, superando la cantidad utilizada en cualquier otro conflicto desde la guerra de Vietnam. Con un margen de error de más de 100 metros, la artillería no guiada es notoriamente poco precisa, y su uso en zonas pobladas constituye un ataque indiscriminado.

En una casa destartalada y medio destruida, Fatima, de nueve años en ese momento, contó cómo había perdido a tres de sus hermanos y hermanas y a su madre, Aziza, cuando la coalición descargó sobre el barrio una lluvia de proyectiles de artillería el 10 de junio de 2017 por la mañana. Sus familiares figuraban entre las 16 personas civiles muertas en esa calle sólo ese día. Fatima perdió la pierna derecha y sufrió graves heridas en la izquierda. Ahora se desplaza en una silla de ruedas donada por una ONG, y su único deseo es ir al colegio.

  • Familias eliminadas en un instante

Las fuerzas estadounidenses, británicas y francesas efectuaron también miles de ataques aéreos sobre barrios civiles, decenas de los cuales causaron víctimas civiles en gran escala.

Un trágico incidente fue un ataque aéreo de la coalición que destruyó totalmente un edificio de viviendas de cinco pisos cerca del colegio de Maari, en el céntrico barrio de Harat al Badu, el 25 de septiembre de 2017 por la tarde. Había cuatro familias refugiadas en el sótano en ese momento. Casi todos sus miembros –al menos 32 civiles, 20 de ellos menores– murieron. Una semana después murieron 27 civiles más –familiares en muchos casos de las personas muertas en el ataque anterior– al destruir un bombardeo aéreo un edificio próximo.

Había aviones bombardeando y cohetes cayendo las 24 horas del día, y había francotiradores del Estados Islámico por todas partes. No se podía siquiera respirar”, contó una superviviente del ataque del 25 de septiembre, Ayat Mohammned Jasem, a un equipo de televisión cuando regresó un año después a su hogar destruido.

 

 

 

 

Fuente: Amnistía Internacional