Propósito para 2019: vivir una vida menos capitalista

Propósito para 2019: vivir una vida menos capitalista
La Navidad es sinónimo de capitalismo en estado puro: compras, atracones, gastar sin medir, cenas y más cenas, excesos... Por eso, hablar de reduccionismo es quizás contradictorio. Sin embargo, en EULIXE somos defensores a ultranza de la contradicción, y por ello os vamos a enseñar algunos trucos para entrar en 2019 de una manera más lógica, solidaria y respetuosa. Porque reconócelo, el capitalismo es cosa del pasado. Ya lo has probado, y es evidente que tener más cosas no te hace más feliz. Lo único que consigues es perpetuar un modelo social injusto, desigual y que hipoteca a las generaciones futuras. Y desde luego quejarte en Twitter o rajar de los políticos tomándote unas cañas con los colegas no va a cambiar nada. Por eso es necesario buscar soluciones alternativas que nos permitan mantener un nivel de vida cómodo, pero para todos. Y sin cargarnos el planeta. Las vías para lograr esto son múltiples y variadas, pero siempre comienzan en el mismo punto: asimilar que no podemos seguir así y empezar a realizar pequeños gestos para cambiar. No es necesario quemarlo todo y empezar de nuevo (aunque quizás sería lo mejor); nosotros, como individuos particulares, somos el punto de partida. Por eso, os dejamos con algunos consejos básicos para que 2019 sea el comienzo del cambio:
  •  Compra menos
Parece evidente, y lo es. Pero llevarlo a cabo no es tan sencillo para todos. Hay trucos que ayudan, como por ejemplo pararte a pensar antes de hacer cualquier compra si en realidad te hace falta. Si dudas, es una compra impulsiva, y ya no queremos eso en 2019, así que fuera. También puede ayudar traducir los euros que vale eso que estás a punto de adquirir en tiempo de trabajo. Para comprar estas zapas Nike me hace falta estar en mi puesto de trabajo un día entero... ¿qué me aporta mas, las zapas o un día sin trabajar? Y para las cosas que nos hacen falta también hay alternativas, como comprar de segunda mano o incluso redes de intercambio como pueden ser Freecycle o No lo Tiro. Para la ropa tenemos también muchas opciones para vestir bien sin necesidad de gastar demasiado, como por ejemplo Adopta una prenda. Una idea tan vieja como el ser humano: compartir e intercambiar en lugar de usar siempre objetos nuevos.
  • Adiós a los bancos
No, no tenemos nada contra los bancos del parque, sino contra los grandes bancos que evidentemente nos roban. En el Estado español, el cálculo sitúa en 912€ lo que cada ciudadano ha aportado hasta ahora para el rescate bancario tras la "crisis" (y lo que queda). Sin embargo ellos han ampliado sus beneficios en grandes cantidades desde entonces. Está claro que es difícil romper con hipotecas o ciertos productos que nos tienen atados, pero cuanto menos usemos las redes de estos criminales, mejor. Usar más efectivo y las cooperativas de ahorro y crédito son una buena forma de comenzar la desconexión bancaria.
  • Mantente en forma
Al igual que dejar de depender del sistema bancario es un gran paso adelante en nuestro proceso de "descapitalización", estar en forma es otro, puesto que dependerás menos de los holding sanitarios para los que tu salud es un negocio (farmacéuticas, seguros privados...). ¿La clave para estar sano? Alimentarse bien y hacer deporte, tan "sencillo" como eso. No se trata de volverse loco, simplemente de ir poco a poco cambiando nuestros hábitos. Respecto a la dieta, debemos centrar nuestros esfuerzos en alejarnos de los productos procesados y menos sanos, y acercándonos a los productos frescos y naturales. Es un proceso largo pero muy satisfactorio. En relación al deporte, decir que es totalmente imprescindible para nuestra salud física y mental. Eso es así. Pero como antes, no se trata de volverse locos, sino de mentalizarnos e ir poco a poco. Y no estamos con esto apoyando a los gimnasios, que en parte son otra eslabón del sistema: música pop a todo trapo, calor, instrumentos que cuentan cada caloría, espejos y frases de autoayuda para recordarte que la meta es estar más guapo... No. No se trata de eso. Puedes correr por el parque y ahorrarte la cuota, o subir y bajar las escaleras andando, o hacer rutinas en casa, ir andando a trabajar... las posibilidades son muchas. Lo importante, luchar contra el sedentarismo.
  • Organízate
A veces parece imposible luchar contra "el sistema", y nos sentimos ridículos cual Don Quijote asestando un golpe de lanza a un molino. Sin embargo, el gobierno, las instituciones, las multinacionales, los medios y todo aquello que organiza y administra las formas de explotación actuales no son nadie sin una población sumisa que acepte. Empieza por ti y deja de aceptar. Seguro que donde vives hay diversas organizaciones con gente insumisa que hace pequeñas cosas, pero hace cosas al fin y al cabo. Desde boicotear marcas que apoyen al apartheid israelí a asociaciones de intercambio de tiempo, pasando por talleres de calceta para invidentes. Todo suma, cada pequeño gesto en contra del sistema es positivo.
  • Produce
Qué ironía, luchar contra el sistema capitalista produciendo. Sin embargo es muy efectivo. Si lo piensas, la base del sistema es otorgar valor añadido a un producto o materia prima, añadirle un poco más a través de la publicidad, y vendértelo muy por encima de su coste. Si tú mismo produces objetos o servicios, tendrás doble recompensa. Por un lado te sentirás realizado al crear algo con tus propias manos. Parece básico, pero es que el ser humano es así. Los mecanismos de recompensa de nuestro cerebro al crear algo por si mismo están ahí. Por otro lado, vendiendo o intercambiando ese producto atacarás al sistema desde la base. Así que manos a la obra!
  • Cultiva tus propios alimentos
Hoy en día producir uno mismo sus alimentos es uno de los actos mas revolucionarios que podemos realizar. Con ello mejoramos nuestra salud y rompemos la cadena de consumo a un mismo tiempo. Si lo piensas, cada vez que comes un tomate de tu huerta, dejas de contaminar debido al camión que lo trae desde miles de kilómetros y por los pesticidas que se dejan de usar para cultivarlo, y dejamos de darle beneficios a una empresa que explota a algún trabajador que lo recoja en un invernadero, entre otros. Y si a nuestro humilde tomate le sumamos millones de tomates mas por todos lados, dejará de ser un humilde tomate y se convertirá en un agente por el cambio social. Libera tu tomate.
  • Piensa
Pues si, pensar por si mismo es un acto revolucionario, quizá el mas importante. El capitalismo lo ha sabido desde el principio, y por eso ha centrado la mayor parte de sus esfuerzos en hacer que no pienses. Desde la educación reglada que nos enseña a memorizar y acatar órdenes como máquinas, a la gran industria del entretenimiento que nos mantiene pasivos, todo al final se reduce a lo mismo: no pienses por ti mismo. Porque si lo haces, puede que acabes dándote cuenta de que la organización social es injusta y mejorable, de que Dios no existe o de que tu amor por la patria es un cuento.
  • Desobedece
Si después de pensar, la idea a la que llegas se enfrenta con la realidad, no tengas miedo en desobedecer. Los grandes medios de comunicación y otros agentes del sistema se empeñan en meter en tu cabeza la idea de que la ley es inviolable. Pero no es así. Si una ley es injusta, no tengas miedo en violarla, puesto que la desobediencia civil es un mecanismo imprescindible para el cambio, y lo ha sido siempre a lo largo de la Historia. John Rawls lo define como un “acto público no violento, consciente y político, contrario a la ley, cometido habitualmente con el propósito de ocasionar un cambio en la ley o en los programas de gobierno”. Pues eso, cultiva tu propio conocimiento, aprende, crea ideas justas dentro de ti y si al expresarlas chocan con una ley, no tengas miedo ninguno en enfrentarte.