Los horrores de la época colonial en África comienzan a reconocerse (un siglo después)

Alemania acaba de reconocer oficialmente que perpetró un genocidio al inicio del siglo XX en la actual Namibia, un territorio que estuvo bajo ocupación alemana durante décadas. El gobierno alemán ha anunciado que indemnizará al país con un fondo de 1.100 millones de euros durante los próximos años, entre otras medidas. Sin embargo, existen por lo menos otros dos países que tienen un pasado colonial genocida en África: Bélgica y Francia. En el caso de Bélgica, el 30 de junio de 2020, el día que se cumplió el 60 aniversario de la independencia del Congo, el rey de los belgas Felipe lamentó “los actos de violencia y los sufrimientos infligidos a aquel país en la época colonial”. Fue la primera ocasión en el que la monarquía belga reconocía la sanguinaria ocupación. Mientras, Francia ha afirmado que no emitirá una disculpa pública por la ocupación de Argelia ni por la cruenta guerra de ocho años que puso fin a 132 años de dominio francés.

Congo belga 1955
Fotografía tomada en 1955 en lo que entonces se denominaba el Congo belga, una colonia del país europeo en suelo africano.
Los horrores de la época colonial en África comienzan a reconocerse (un siglo después)

Alemania

La actual Namibia estuvo ocupada durante el siglo XIX por varios países europeos. Fue a partir de 1840 cuando el gobierno alemán se impuso en la región y colonizo el territorio, que en 1884 pasó a llamarse África del Sudoeste Alemana. Las autoridades coloniales germanas explotaron los recursos naturales y esclavizaron a la población del lugar.

Bundesarchiv_Bild_105-DSWA0095,_Deutsch-Süd-Westafrika,_Kamelreiterpatrouille
Cuatro soldados alemanes en una patrulla de camellos, Schutztruppe, en 1906. Fuente: Bundesarchiv, Bild 105-DSWA0095 / Walther Dobbertin / CC-BY-SA 3.0 – Wikipedia

 

El genocidio tuvo lugar entre los años 1904 y 1908, después de que la población local intentara liberase del yugo de los colonizadores. A falta de cifras oficiales, se calcula que las tropas alemanas asesinaran a unas 70.000 personas. De esas 60.000 eran de la etnia herero y otras 10.000 de la etnia nama.

El genocidio contras los herero y los nama [...] es el peor crimen de la historia colonial alemana. Durante la Batalla de Waterberg en 1904, la mayoría de los rebeldes herero huyeron hacia el desierto, donde las tropas alemanas bloquearon sistemáticamente el acceso de estos al agua. Se estima que fallecieron más de 60.000 herero. Solo alrededor de 16.000 herero sobrevivieron a la campaña de exterminación. Estuvieron detenidos en los campos de concentración, donde muchos fallecieron – DW

Erichsen_p.57_v2

Niño preso muerto de hambre, África del Sudoeste Alemana. Fuente: Erichsen, "The angel of death has descended violently among them," University of Leiden, 2005, p. 57 / WIkipedia

Bundesarchiv_Bild_146-2003-0005,_Deutsch-Südwest-Afrika,_Kriegsgefangene_Herero

Prisioneros de guerra nama alrededor de 1900. Fuente: Bundesarchiv, Bild 146-2003-0005 / Unknown author / CC-BY-SA 3.0 - Wikipedia

 

Debido a la derrota que registró Alemania en la Primera Guerra Mundial (1914-1919), el país fue obligado a devolver todas las colonias. De este modo, el territorio namibio pasó a formar parte de Sudáfrica. No se independizó como país hasta los 90.

El gobierno alemán ha anunciado que indemnizará al país con un fondo de 1.100 millones de euros durante los próximos años, según cita La Vanguardia. El fondo se destinará a proyectos de desarrollo y pretende beneficiar sobre todo a las etnias herero y nama, que fueron las comunidades más afectadas por el genocidio.

Además, Alemania devolverá los restos humanos que las tropas coloniales se llevaron para su estudio en laboratorios. Los restos se encuentran actualmente repartidos entre diferentes museos, hospitales y universidades germanas.

Bélgica

Leopoldo II de Bélgica (1835-1909) pasará a la historia como uno de los mayores genocidas que ha conocido la humanidad. Además de su función como gobernante, este monarca fue un hombre de negocios sin escrúpulos. En la conferencia de Berlín de 1885, donde se decidió el reparto entre las potencias europeas de África, el monarca recibió, a título personal, el Estado Libre del Congo.

Leopoldo II de Bélgica explotó durante varios decenios el país. Aunque durante los primeros años la mayoría de los ingresos provinieron del marfil, la extracción de caucho se consolidó como la mayor fuente de divisas, ya que a partir de 1896 la demanda de este polímero de disparó en los mercados internacionales.

Poco importaban la vida o la salud de los congoleños, que día y noche, bajo unas condiciones de esclavitud inhumanas, sacrificaban su existencia para el enriquecimiento personal del monarca. Secuestros de menores, cortes de extremidades como castigo, violaciones, asesinatos masivos…fueron algunas de las horrendas técnicas que aplicaron las unidades de La Force Publique para someter la población local.

2020011417560489296

Congoleño esclavizado extrayendo caucho de una enredadera cerca al pueblo de Lusambo en Sankuru. Fuente: Wikipedia

 

En un contexto donde el cumplimiento de la cuota o la sumisión significaban la delgada línea que separaba la vida de la muerte, el horror y la impunidad se convirtieron en norma. Se calcula que en unas 10.000.000 de personas fueron asesinadas bajo el reinado de Leopoldo II. El monarca, que nunca vio el terror en directo porque jamás puso un pie en su único territorio de ultramar, exterminó a la mitad de la población en 23 años.

El poder aplicado sobre la vida misma, así se podría definir la política de genocidio llevada a cabo por los belgas en la época del Estado Libre del Congo. Los congoleños, al ser clasificados como meros sujetos biológicos que aportaban mano de obra, se convirtieron en engranajes de un sistema de esclavitud aplicado a escala industrial.

Fueron numerosos los escritores, periodistas, activistas y hombres de negocios tanto estadounidenses como británicos que descubrieron y denunciaron públicamente las atrocidades cometidas en el Estado Independiente del Congo. La presión nacional e internacional sobre Leopoldo fue de tal envergadura que en 1908 se vió obligado a renunciar a la colonia. Según señalan los historiadores Ramón Villares y Ángel Bahamonde, en 1908, el Congo pasó, “como donación”, a titularidad del Estado Belga. La época colonial duró hasta la década de los 60, cuando el país logró su independencia.

MutilatedChildrenFromCongo

Personas congoleñas mutiladas. Fuente: Alice Harris, Daniel Danielson, others. - King Leopold's Soliloquy: A Defense of His Congo Rule, By Mark Twain, Boston: The P. R. Warren Co., 1905, Second Edition - Wikipedia.

 

El 30 de junio de 2020, el día que se cumplió el 60 aniversario de la independencia del Congo, el rey de los belgas Felipe lamentólos actos de violencia y los sufrimientos infligidos a aquel país en la época colonial”. Fue la primera ocasión en el que la monarquía belga reconocía la cruel explotación. En la carta que envió el mismo día al presidente de la República Democrática del Congo, Félix Tshisekedi, Felipe reconoce lo siguiente:

En la época del Estado independiente del Congo se cometieron actos de violencia y crueldad, que pesan todavía sobre nuestra memoria colectiva. El periodo colonial que siguió provocó igualmente sufrimiento y humillaciones. Quiero expresas mis lamentaciones más profundas por estas heridas del pasado, el dolor de las cuales se reaviva por las discriminaciones aún hoy demasiado presentes en nuestras sociedades – Felipe de Bélgica

Esta reacción de la monarquía belga vino después de que, a raíz de la muerte de George Floyd a manos de la policía estadounidense, las protestas también tomaran Bélgica y se focalizaran en ataques a la memoria y a las estatuas de Leopoldo II. El ejecutivo, por su parte, respaldó las palabras del rey. “Ha llegado la hora de que Bélgica mire cara a cara a su pasado. Esto pasa por el reconocimiento de los sufrimientos de los demás. Un sufrimiento reconocido por nuestro soberano”, declaró el 30 de junio de 2020 la primera ministra Sophie Wilmes.

800px-Belgique_-_Bruxelles_-_Monument_au_général_Storms_-_06

El Monumento al General Storms en Bruselas pintado con pintura roja, símbolo de la sangre del pueblo congoleño. Fuente: EmDee / Wikipedia

Francia

Entre 1830 y 1962 Argelia estuvo ocupada por Francia. El colonialismo francés se vio envuelto en crímenes atroces contra la humanidad, incluidos el genocidio, tortura, asesinato, pruebas nucleares y el saqueo a los archivos históricos del país.

1024px-Algérie_fr

Mapa de los tres departamentos franceses de Argelia en 1877: Oran, Argel y Constantina. Fuente: Alexandre Vuillemin (1812-1880) / Wikipedia

 

Según el presidente argelino Abdel Majid Tebboune, más de 5 millones de argelinos murieron a manos de los colonos franceses en un lapso de un cuarto de siglo. La Liga Argelina para la Defensa de los Derechos Humanos, sin embargo, cifra en 10 millones en un informe que se hizo público en 2017.

La mayor atrocidad cometida por los franceses ocurrió el 8 de mayo de 1945. Aquel día, cientos de miles de argelinos celebraron el final de la Segunda Guerra Mundial y exigieron que Francia cumpliera su promesa de otorgarles la independencia. Las fuerzas coloniales respondieron con munición real y asesinaron a 45.000 civiles desarmados.

El 17 de octubre de 1957, unos 60.000 argelinos se manifestaron en Francia contra el colonialismo. Los franceses volvieron a responder con munición real, en un incidente que llegó a conocerse como el “Crimen del río Sena” y en el que murieron 1.500 personas, 800 desaparecieron y miles fueron detenidas.

Moudjahiddines_algériens_à_la_montagne

Rebeldes argelinos. Fuente: Fayeqalnatour / Wikipedia

 

Según las estimaciones efectuadas por los historiadores argelinos, 1.5 millones de argelinos perdieron la vida durante el transcurso de la lucha por la independencia (1954-1962). Los historiadores franceses cifran este número en 400.000 en ambos bandos durante la Guerra de Independencia de Argelia.

Francia utilizó a civiles como rehenes y escudos humanos en su guerra contra el Ejército de Liberación Nacional de Argelia. Según los historiadores, las autoridades francesas arrasaron pueblos enteros mientras se practicaban diferentes formas de tortura contra la población argelina, incluido el electrochoque, el uso de pozos de agua como prisiones y el lanzamiento de detenidos desde helicópteros – Agencia Anadolu

Por otro lado, las autoridades coloniales francesas llevaron a cabo varios experimentos nucleares en Argelia que han tenido, según la agencia turca Anadolu, “efectos peligrosos en la población local”. Según Aljazeera, las estimaciones del número de argelinos afectados por las pruebas oscilan entre 27.000, citado por el Ministerio de Defensa francés, y 60.000, cifra proporcionada por Abdul Khadim al-Aboudi, profesor argelino de física nuclear. [Para más información, consultad el siguiente enlace]

Gerboise_bleue_nuclear_test

Test nuclear Gerboise Bleue (13 de febrero de 1960). Fuente: Archive CEA / Wikipedia

 

El 20 de enero de 2021, el presidente francés Emmanuel Macron afirmó que no emitirá una disculpa pública por la ocupación de Argelia ni por la sangrienta guerra de ocho años que puso fin a 132 años de dominio francés. “No habrá arrepentimiento ni disculpas”, dijo su oficina a la emisora pública France 24. El dirigente francés añadió que en su lugar celebraría “actos simbólicos” destinados a promover la reconciliación.

La información se dio a conocer el mismo día que Macron tenía previsto reunirse con el destacado historiador Benjamin Stora en el Eliseo y aceptar su informe sobre la colonización de Argelia. Stora recibió el encargo de redactar el informe de Macron en julio del año pasado para garantizar que “la historia de Argelia sea conocida y vista con lucidez”. 

Stora propone 22 medidas que van desde las conmemoraciones de masacres de argelinos en Francia o de los harkis (musulmanes que combatieron con Francia contra la independencia) hasta la localización de los restos de los desaparecidos en ambos bandos durante la guerra.  

Los argelinos, sin embargo, han exigido en varias ocasiones que Francia reconozca y se disculpe por las prácticas discriminatorias y criminales cometidas durante el dominio colonial del país.  

Aunque Macron haya declinado efectuar una disculpa oficial, es uno de los pocos líderes franceses que ha reconocido el sangriento pasado colonial del país. En 2017, como candidato presidencial, Macron condenó inequívocamente la historia colonial de Francia calificándola de “crimen contra la humanidad”, y como jefe de Estado insistió en la “necesidad de representar mejor ciertas partes de la historia colectiva e integrar la historia de la colonización”.